Los inicios de la pintura

Para conocer esta expresión artística a fondo debemos partir por su definición. La pintura es el arte por medio del cual se representa en una superficie plana un hecho real o imaginario a través del color y la forma.

A lo largo de la historia ha adoptado diferentes formas y conceptos, dependiendo de los distintos medios y técnicas propios de cada una de las tendencias artísticas y los momentos socio culturales de la epoca.

La expresión prehistórica

Las pinturas que se conocen desde la antigüedad fueron realizadas en las paredes de las cuevas que servían de abrigo a la especie humana hace 30.000 años, durante el periodo paleolítico. Hay muestras del arte paleolítico en emplazamientos de Europa occidental, del África sahariana y del sur, y en Australia.

Sobre los muros existen dibujos exactos de bisontes, caballos y ciervos, coloreados con minerales pulverizados mezclados con grasa animal, clara de huevo, extractos de plantas, cola de pescado e incluso algo de sangre.

Arte egipcio

Hace más de 5.000 años los artistas egipcios empezaron a pintar los muros de las tumbas de los faraones con representaciones mitológicas y escenas de las actividades cotidianas, como la caza, la pesca, la agricultura o la celebración de banquetes.

En primer lugar, las imágenes, más conceptuales que realistas, presentan los rasgos anatómicos más característicos, combinando las vistas frontales y de perfil de la misma figura; en segundo lugar, la escala de las figuras indica la importancia de las mismas, y así el faraón aparece más alto que su consorte, hijos o cortesanos.

Arte griego

A comienzos de siglo pasado fueron descubiertos los más antiguos vestigios del arte occidental, en la isla de Creta (Mar Mediterráneo). Se trata de los frescos del palacio de Cnosos, que muestran la leyenda del Minotauro (monstruo con cuerpo de hombre y cabeza de toro) y el Laberinto. En estas pinturas se pueden ver trazados los juegos y deportes de la época, además del salto sobre el toro, con una calidad del color realmente impresionante.

Los pintores más importantes de Grecia fueron Apeles, Polignoto y Zeuxis. Los temas más recurrentes eran los guerreros, las luchas y la danza.

Pintura romana

Los romanos decoraban sus villas con suelos de mosaicos y exquisitos frescos representando rituales, mitos, paisajes, naturalezas muertas o bodegones, y escenas cotidianas.

Los artistas romanos conseguían crear la ilusión de realidad, utilizando la técnica conocida como perspectiva aérea, mediante la que se representan de forma más borrosa los colores y contornos de los objetos más distantes para conseguir efectos espaciales.

Los romanos decoraban constantemente sus casa, que tenían las paredes pintadas con representaciones de rituales, mitos, paisajes, naturalezas muertas y escenas cotidianas. Además, hay muchos retratos femeninos de la familia imperial. Los romanos utilizaban mucho la técnica de la perspectiva aérea, por medio de la cual se representaban en forma borrosa los colores y contornos de los objetos más alejados, con lo que se pretendía conseguir efectos espaciales.

Las pinturas al encauste -que utiliza una sustancia gomosa como disolvente de los colores- sobre una tabla constituyen la primera demostración de pintura de caballete; es decir, transportable.

Arte cristiano

Las muestras de pintura paleocristiana que han llegado hasta nosotros datan de los siglos III y IV y son los frescos de las catacumbas (cementerios subterráneos), en los que se representan escenas del Nuevo Testamento, cuya característica son ciertas estilizaciones y convencionalismos artísticos procedentes del mundo clásico. Por ejemplo, Jesús aparecía como el Buen Pastor, con una figura adoptada de las representaciones del dios griego Hermes; para simbolizar la resurrección se representaba la historia de Jonás liberado de la ballena, según el Antiguo Testamento

Sin embargo, la verdadera pintura cristiana aparece en el siglo V con la construcción de iglesias, con figuras como la Virgen y la adoración de los Reyes Magos.

Arte bizantino


Arte bizantino, conjunto de manifestaciones artísticas desarrolladas en el Imperio romano de Oriente. La capital de este estado fue Constantinopla, la antigua ciudad griega de Bizancio, que el emperador romano Constantino I el Grande refundó el año 330 con su nombre.

Los trazos que daban los pintores de esta época eran un tanto rígidos; sin embargo, lograban una buena relación entre la técnica utilizada y la expresión artística.

Otra técnica importante se encuentra en los esmaltes sobre metales, con los que decoraban ciertos objetos de culto con fuertes contrastes de colores. La Pala d’Oro es la obra maestra de la esmaltería bizantina. Se encuentra ubicada en la iglesia de San Marcos, en Venecia (Italia).

Arte Románico

Es el arte de toda la Europa Occidental entre los siglos X y XIII. Está representada básicamente por los frescos que adornan los muros de las iglesias con el objetivo de contar las leyendas cristianas y representar a la Virgen y Jesucristo.

Las obras son bastantes simples, ya que los pintores de aquella época ignoraban la anatomía y el modelado de los cuerpos desnudos, por consideraciones religiosas.

El arte Gótico

Durante el principio del periodo gótico, la estructura de las catedrales concedía mayor importancia a las ventanas, por lo que las vidrieras desempeñaron un papel más prominente en el arte que los manuscritos miniados. Los artistas laicos instalaron sus talleres en París y en otros centros importantes, produciendo elaborados manuscritos miniados para los clientes reales. Hasta nosotros han llegado pinturas de temas seglares realizadas en aquel periodo, sobre todo en Italia.