Estructura de la obra dramática

La obra dramática posee una estructura especial, es decir, está construida en forma particular y propia. Está dividida en actos, que normalmente son tres y sirven para separar los momentos dentro de la historia.

Capítulos, cuadros y escenas

En cada acto se presenta una especie de capítulo distinto, que muestra cómo se va desarrollando la historia.

Dentro de cada acto pueden encontrarse distintos cuadros. El cuadro es una división que se genera cuando hay un cambio de escenografía, cuando el lugar donde se desarrolla la acción es distinto. Si la acción transcurre en el interior de una casa, y luego se muestra a los personajes en el jardín, ha comenzado un nuevo cuadro.

Dentro de los actos también hay otras divisiones más pequeñas, que son las escenas Estas comienzan o terminan cuando un personaje nuevo entra o sale del escenario. Es decir, si al comienzo de la acción, escena primera, hay tres personajes, y uno de ellos se retira, comienza la segunda escena. Lo mismo ocurriría si en lugar de retirarse un personaje, entrara otro nuevo.

Una guía

Es importante decir que estas divisiones no son obligatorias. Hay obras dramáticas que, por ejemplo, están escritas en un solo acto. También, algunos dramaturgos no señalan los comienzos de escenas ni de cuadros en sus obras.

De todas formas, hacer estas divisiones tiene por objeto ayudar al posible director de la obra teatral. Es a él a quien le servirán como guía para cuando realice el montaje de la obra dramática, pero no significa que siempre tengan que estar presentes.

El lenguaje

Dentro de la obra dramática, existen distintos tipos de lenguaje. El lenguaje acotado o acotaciones, se trata de lenguaje que se utiliza para que entendamos mejor la obra y podamos imaginar lo que el dramaturgo nos quiere transmitir: el título, las indicaciones del escenario, del movimiento o los gestos de los personajes, etcétera.

Parlamento

Por otra parte, en este trozo los personajes también han hablado. Todo el lenguaje que se usa para dar forma a esta conversación, es lo que denominamos parlamento, es decir, lo que los personajes dicen. Este parlamento puede estar expresado, como en este trozo, mediante un diálogo, una relación de dos personas que se comunican, en la que una habla y la otra le escucha y viceversa, o mediante un monólogo, en el que una persona habla para sí mismo.

Distinto de esto es el aparte, en el que un personaje habla como pensando que los demás personajes no lo escuchan. Es como si hablara nada más que para el público, y se supone que los demás personajes no pueden oír.