Los mamíferos
Mamífero, nombre común que se aplica a cualquier animal de sangre caliente (más apropiado es el término homeotermo, es decir, cuya temperatura corporal permanece constante independientemente de las condiciones ambientales) perteneciente a la clase en la que se incluyen el ser humano y otras especies que se caracterizan por tener el cuerpo recubierto de una cantidad variable de pelo, por la existencia de glándulas mamarias para alimentar al recién nacido, y por presentar la cavidad corporal dividida en dos partes (cavidad torácica y cavidad abdominal) por medio de una membrana musculosa denominada diafragma, la cual desempeña un papel muy importante en la respiración.
Es muy probable que la aparición de los mamíferos en la Tierra ocurriera al principio de la era mesozoica. En esta época había un grupo de reptiles que poseían características de mamíferos; eran muy frecuentes desde el periodo pérmico al triásico y se conocen como el orden de los Terápsidos. Con el tiempo, dieron lugar a distintas ramas evolutivas en las que fueron apareciendo rasgos típicos de los mamíferos al tiempo que se entremezclaban con los reptilianos.
Esto sucedió hace unos 180 millones de años cuando declinaron dejando una línea de descendientes que no resurgiría hasta pasados 100 millones de años, durante los cuales los grandes reptiles predominaron en la Tierra. Los primeros fósiles correspondientes de forma definitiva a un mamífero fueron encontrados en rocas del jurásico.
Se tienen antecedentes de que durante el Período Jurásico ya existían tres órdenes distintos de mamíferos. Uno estaba formado por especies pequeñas similares a roedores, que tenían características dentales típicas de estos animales, pero se extinguieron durante el Período Eoceno (hace unos 55 millones de años). Un segundo orden consistía en mamíferos pequeños y carnívoros, que también se extinguieron antes de finalizar el Eoceno. El tercer grupo estaba formado por mamíferos del tamaño de una rata, con una dieta insectívora, los que casi con toda seguridad se pueden identificar como los predecesores de los mamíferos actuales. Luego de la desaparición de los grandes reptiles, al final de la Era Secundaria, la línea evolutiva de los mamíferos se desarrolló en Era Terciaria con gran éxito, por lo que esta Era se conoce como la Era de los Mamíferos.