La vida en los océanos
El océano es un cuerpo extenso de agua salada el cual se encuentra cubriendo unas tres cuartas partes de la superficie de la Tierra. Alrededor de 71 por ciento de la superficie de la Tierra está cubierta de agua. El resto corresponde a los continentes e islas. El aspecto superficial del océano se conoce hoy gracias a la observación espacial. Vivimos en el llamado “planeta azul”.
Los usos económicos del océano dependen de cosas tan básicas como son su gran superficie y volumen, junto a las propiedades físicas y químicas del agua marina. Su combinación de densidad alta y viscosidad baja lo hacen apropiado para el desplazamiento de barcos; su composición química compleja sustenta un entramado alimentario complicado que empieza en la fotosíntesis e incluye a los peces que los seres humanos encuentran sabrosos y nutritivos.
Su opacidad a la radiación solar lo hace oscuro, y esto, junto a su volumen enorme, alienta la ocultación en él de cualquier cosa, desde desechos hasta submarinos nucleares. Sus calores específico y latente elevados lo convierten en regulador del clima terrestre y de la existencia humana.
El océano ha sido utilizado desde mucho antes de la historia registrada: sin embargo, hoy hay mucha más gente con maquinaria, herramientas y fuentes de energía más poderosas. Se requiere una comprensión mejorada del océano si no se quiere sobreexplotar su capacidad.