El morfema

El morfema es un signo lingüístico mínimo en que pueden descomponerse las palabras de una lengua. Constituye la unidad mínima del análisis morfológico o gramatical.

Algunos autores lo denominan monema y distinguen dos tipos, lexemas y morfemas, dependiendo de si su significado es léxico o gramatical. En la actualidad se suele utilizar el término morfema para todos ellos.

Los morfemas no pueden descomponerse en otros signos, unidades con significante y significado, pero sí en fonemas, que tienen significante y capacidad de diferenciar significados ( cama se distingue de cana por la oposición entre los fonemas /m/ y /n/), pero que no son unidades con significado.

Los morfemas son unidades abstractas con significante, el segmento fonémico o morfo, y significado constante.

De base (MB)

Se encarga de dar a la palabra su significado fundamental, también se le conoce como «radical o raíz de la palabra».  Un ejemplo sería en la palabra «vestiditos», el morfema base es vestid, ya que este grupo es el que hace que la palabra tenga su significado, y la terminación itos nos proporciona otro tipo de información. Aún así aunque el ejemplo anterior quede claro, muchas de las ocasiones nos resulta muy difícil reconocer cuál es el morfema de base o radical de una palabra.

Para poder localizarlo de una manera más sencilla, analiza las siguientes reglas:

  • Si la palabra es un sustantivo o un adjetivo que termina en vocal , para reconocer su morfema de base o raíz, se debe sacar la vocal final. Así, el morfema de base de camisa, será camis; el morfema de base o raíz de loco, será loc, etcétera.
  • Ahora, si la palabra termina en vocal, pero esta vocal está dentro del diptongo io o ia, no solo hay que quitar la vocal final, sino todo el diptongo. Por ejemplo: en la palabra cementerio, el morfema de base es cementer y no cementeri.
  • Si la palabra es un sustantivo o un adjetivo que termina en consonante , el morfema de base es toda la palabra. Por ejemplo, en la palabra árbol, que termina en l, árbol es la raíz. Lo mismo sucede con reloj, cuyo morfema de base es reloj.
  • Si se trata de una palabra de tres sílabas o más que termina en tad o en dad, el radical o morfema de base es lo que queda si se quita la terminación ad. Por ejemplo, en vanidad, la raíz es vanid. En amistad, el radical es amist. Sin embargo, si la palabra tiene solo dos sílabas se aplica la regla anterior; por ejemplo bondad, en que la palabra completa es el morfema de base.
  • Si la palabra es una forma verbal , para reconocer el radical se debe pensar en el verbo en infinitivo, y quitar la terminación ar, er o ir. Lo resultante será el morfema de base. Por ejemplo, si la palabra es cantaba, el infinitivo es cantar, una vez suprimida la terminación, podemos reconocer el radical que es en este caso es cant.

Si bien es cierto estas reglas a veces tienen excepciones, guiándote por ellas podrás reconocer más fácilmente el morfema de base de las palabras que componen nuestro idioma.

Gramatical

Este es el segundo tipo de morfema, y entrega a la palabra cierto tipo de información gramatical, más que de significado propiamente tal. Existen dos tipos de morfemas gramaticales, el verbal (MGV) y el nominal (MGN).

  • El morfema gramatical verbal es el que otorga las terminaciones a las formas verbales. Por ejemplo, en la palabra jugaban, el morfema de base es jug, porque es lo que queda del infinitivo quitándole la terminación ar. A continuación, tenemos dos morfemas gramaticales verbales: aba, que es el indicador del tiempo y del modo (pretérito imperfecto, modo indicativo) y n que es el indicador de la 3ª persona plural en las conjugaciones verbales.
  • También existen dos clases de morfema gramatical nominal : el que indica género y el que indica número. En el sustantivo abuelos, el morfema de base es abuel; el morfema gramatical que indica género, en este caso masculino, es o; y el morfema gramatical que indica número, que en esta palabra es plural, es s.
    Ahora bien, hay palabras en las que el morfema gramatical nominal de género o de número no está escrito, pero de todas maneras está presente.

El hecho de que no aparezca en forma explícita también significa algo. Veamos un ejemplo: la palabra palomas se analizaría así:

palom……….a……….s
….MB………MGN…MGN
…………..género número
…………..femenino plural

Además del morfema de base , hay un morfema gramatical que indica que el sustantivo es femenino, y otro morfema gramatical que indica que es plural.

Pero ¿qué ocurre si la palabra es paloma?

palom………a………….Ø
…MB………MGN….MGN
…………..género…… número
…………..femenino… singular

Con el símbolo matemático de conjunto vacío, representamos que el morfema gramatical de número no se encuentra escrito. Pero, de todas maneras está presente, indicando que el sustantivo está en singular. Veamos con lo que ocurre con la palabra televisor.

televisor……..a………….Ø
……MB…….MGN….MGN
…………..género…… número
…………..masculino…singular

Aquí, para indicar el género y el número, el morfema no aparece. No puede aparecer, ya que esa es la forma de marcar el masculino en esta palabra, ya que no es televisoro ni televisore ; lo mismo ocurre con el singular.

Lexicogenésico (ML)

Es el tercer tipo de morfema que existe en nuestra lengua, y se trata de pequeñas unidades de significado -como todos los morfemas-, pero que en este caso sirven para ser agregados a las palabras que ya existen y modificarlas, para así formar palabras nuevas. Hay morfemas lexicogenésicos prefijos, que son los que se utilizan antes del morfema de base de la palabra que se quiere modificar.

Un ejemplo de morfema lexicogenésico prefijo es el que modifica a la palabra mercado en la palabra supermercado. El prefijo aporta la idea de muy grande , el morfema de base es mercad y o es el morfema gramatical de género. El número es singular, el morfema gramatical de número no está escrito. También los hay sufijos, que se sitúan después del morfema de base de la palabra a la que modifican.

Lo mismo ocurre con el ML sufijo ecit , por ejemplo, en la palabra nietecito, donde niet es el radical y o el MGN de género.

Los ML prefijos o sufijos , que a pesar de ser diferentes entregan la misma información y modifican a las palabras de la misma manera, se llaman alomorfos. Por ejemplo, las palabras obediente, político y fiel, están expresadas en forma positiva. Si se las quiere transformar para que digan lo contrario, es necesario agregar un prefijo que entregue la idea de negación . Pero a cada una de estas palabras le corresponde un prefijo distinto:

-Para obediente, será des: desobediente.
-Para político, será a: apolítico.
-Para fiel, será in: infiel.

Así, los prefijos des, a e in son alomorfos , variaciones de un mismo sentido.