El mundo dramático
En las obras narrativas existe un mundo dramático, pero que parece real cuando nos aventuramos a leer una obra dramática, y mucho más cuando podemos presenciar su representación escénica, es decir, cuando la vemos convertida en obra teatral. En este mundo existen tres elementos: la acción, los personajes y el ambiente, determinado por el espacio y el tiempo. Una obra de teatro está formado por dos tipos de textos: texto principal o primario y texto secundario.
Texto Principal
Es el contenido, propiamente, de la obra. Se divide en:
- Actos: Es una unidad temporal y narrativa, que está marcado por la subida y bajada el telón.
- Cuadros: Parte del texto que está marcada por el cambio total o parcial del decorado.
- Escenas: Parte de la obra que viene determinada por la entrada o salida de los actores. Cada vez que cambia el número de actores en escena, cambia la escena.
El texto principal usa tres formas de expresión, las cuales son:
- Diálogo: Es la conversación entre dos personajes.
- Monólogo: Es el modo de expresarse cuando un solo personaje está hablando. Se llama también soliloquio.
- Aparte: Es la forma de hablar de uno o varios personajes que utilizan cuando dicen algo sobre la obra, y los demás personajes fingen no enterarse.
Texto Secundario o Acotaciones
Aporta información para la representación teatral. Ésta puede ser
Sobre la acción
- Datos e indicaciones sobre el lugar en el que se desarrolla la acción: decorados, época, mobiliario, etc.
- Iluminación, con la que se expresan la hora del día, un espacio concreto, etc.
- Sonidos, para indicar o provocar diversos efectos.
Sobre los personajes: vestuario, movimientos, gestos, tono de voz, intencionalidad expresiva, etc