Abelardo L. Rodríguez
(1877-1963) Presidente de la República de 1932 a 1934. Nació en San José de Guaymas, Sonora, el 12 de mayo de 1889. Gracias a sus méritos observados en campaña, obtuvo varios ascensos en la carrera de las armas. En 1920 se adhirió al Plan de Agua Prieta, y al triunfo de éste fue nombrado Comandante Militar del Territorio Norte de Baja California . En 1923 recibió también la responsabilidad de Gobernar aquel estado, cargo que ocupó hasta 1929, cuando el Gobierno Federal lo comisionó a recorrer varios países de Europa, con la encomienda de estudiar las técnicas de vanguardia en la industria y en la aviación.
A su regreso, se hizo cargo de la Secretaría de Guerra y Marina, en 1931, y de la Secretaría de Industria, Comercio y Trabajo, en 1932. Ese mismo año, ocurrió la renuncia a la Presidencia de la República del ingeniero Pascual Ortíz Rubio, por lo que el Congreso de la Unión designó a Abelardo Rodríguez Presidente sustituto, cargo que ocupó del 4 de septiembre de 1932 al 30 de noviembre de 1934.
Durante su gestión fundó el Banco Hipotecario y de Obras Públicas, creó la ley de beneficencia privada y la ley orgánica de la Universidad Autónoma de México, además de que inauguró el Palacio de Bellas Artes. Asimismo correspondió a Abelardo L. Rodríguez, expropiar el predio «La Bombilla», para hacer un parque y monumento a Alvaro Obregón; instaurar la educación socialista y dictar la ley sobre monopolios.
Estableció la Nacional Financiera y amplió el período presidencial de cuatro a seis años de gestión. En 1943, fue electo gobernador del estado de Sonora, donde realizó importante labor educativa. Durante su gestión creó la Universidad del Estado y dio especial y fuerte impulso a la educación superior. Al concluir su mandato se retiró a la vida privada para dedicarse a los negocios y la actividad industrial. Murió en la ciudad norteamericana de La Jolla, California, en 1967.