La edad de los metales
La Edad de los metales comenzó en el cercano oriente en el cuarto milenio a.C. y constituyó la última fase de la prehistoria, inmediatamente anterior a la aparición de la escritura.
La Edad del cobre o calcolítico
Si bien el hombre había perfeccionado cada vez más las técnicas para labrar la piedra, sus instrumentos seguían siendo toscos y su uso era limitado, ya que se quebraban y gastaban con facilidad. Se necesitaba un material más resistente y fácil de trabajar. Fue entonces cuando descubrieron el cobre. En una primera etapa, le daban forma golpeándolo con un martillo, de acuerdo a la herramienta que necesitaban.
Más adelante, aprendieron a fundirlo; vaciándolo en moldes podían hacer instrumentos de cualquier tamaño y forma. La fundición del cobre coincidió además con el desarrollo de la metalurgia del oro, la plata, el estaño y el plomo.
Edad del bronce
Se pueden distinguir diferentes círculos de cultura perfectamente caracterizados. El nórdico se localizó en los países ubicados al norte, sur y oeste del continente europeo. Los objetos que se elaboraron fueron hachas y espadas, puñales triangulares, alarbadas parecidas a los españolas, agujas sencillas y collares hechos con un aro de bronce. En el círculo de cultura de Hungría abundaron los vasos pequeños. La verdadera Edad de Bronce se inició en el momento en que el hombre aprendió a aprovechar sus cualidades y lo utilizó en la fabricación de herramientas. Desde España se extendió por toda Europa la llamada civilización del vaso campaniforme; de ella se han hallado relativamente pocos vestigios.
La Edad del Hierro
El uso del hierro empezó en Grecia, apareciendo primero en objetos sencillos como anillos, agujas, fíbulas. Aunque era conocido ya anteriormente, fueron los hititas los que consiguieron utilizar por primera vez este metal para la fabricación de armas en gran escala.
Con la introducción del hierro se operó un cambio general en la civilización. El pueblo que se mostró más activo durante toda la Edad de Hierro fue el celta, que ocupó el sur de Alemania durante la Edad de Bronce.