Reproducción de los bosques

Los árboles, como casi todas las demás plantas, se reproducen por alternancia de generaciones. Los óvulos y el polen pueden formarse en una misma flor o en una misma inflorescencia. Pero muchos árboles, como los acebos, fresnos, arces, tejos, enebros y ginkgos, tienen plantas con flores sólo masculinas o sólo femeninas. La polinización suele ser anemófila o entomófila, aunque varias especies de abedul producen semillas fértiles sin necesidad de polinización.

Las especies arbóreas disponen de dos tipos de reproducción: sexuada, con producción de semillas, y asexuada, mediante retoños o renuevos.

La reproducción asexuada está limitadas al círculo inmediato del árbol, debido a que se produce un nuevo retoño desde la base o desde las raíces, el que se desarrolla como árbol independiente.

Normalmente, cuando ocurre este tipo de reproducción, el árbol joven sustituirá, con el tiempo, al viejo que le dio origen. Con la reproducción asexuada el árbol originario marca su territorio, debido a que sus descendientes son idénticos en sus caracteres hereditarios. Esta situación es ventajosa cuando las condiciones de vida no cambian, pero resulta poco adecuada para hacer frente a las variaciones medioambientales.

Es aquí donde reside la mayor diferencia entre ambos tipos de reproducción, por cuanto la reproducción sexuada implica una combinación de las características hereditarias de ambos progenitores. Las semillas formadas contienen por esto una variedad más amplia de propiedades y posibilidades de vida que los especímenes parentales. La reproducción sexuada se ve favorecida por la acción de agentes como el viento, que transporta el polen de un árbol a otro, o de animales que distribuyen las semillas a veces a lugares muy distantes.

La reproducción donde intervienen los insectos se denomina fecundación entomófila y junto con ser más eficiente requiere menos producción de polen.

Beneficio de los bosques

  • Purificación de la atmósfera, enriqueciéndola con oxígeno y eliminando el dióxido de carbono.
  • Otorga alimento y refugio a la fauna silvestre.
  • Regulación del clima: estabilización de la temperatura y la humedad.
  • Regulación del régimen hidrológico: permiten que el agua de lluvia sea mejor aprovechada.
  • Protección del suelo: evitan la erosión .
  • Proporciona numerosas materias primas, como madera, celulosa, corcho y resina .
  • Proporciona alimentos, como castañas, nueces, piñones, etc.
  • Aprovechamiento de otros componentes o subproductos del bosque, tales como hongos, plantas medicinales, frutos silvestres o elementos para artesanía.