Pacto de Varsovia

Al finalizar la 2º Guerra Mundial, el equilibrio geoestratégico cambió su orientación y, como consecuencia de la denominada «guerra fría«, comenzó a fundamentarse en la confrontación de bloques o áreas de influencia, encarnados en dos grandes alianzas militares defensivas: la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) y el Pacto de Varsovia.

Pacto de Varsovia (oficialmente, Tratado de Amistad, Colaboración y Asistencia Mutua),  es una alianza militar formada por ocho países comunistas europeos, la cual fue creada para contrarrestar el rearme de la República Federal de Alemania, popularmente llamada Alemania Occidental, y su ingreso en la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN).

Este fue firmado en Varsovia el día 14 de mayo de 1955 por Albania, Bulgaria, Checoslovaquia, República Democrática de Alemania, Hungría, Polonia, Rumania y la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS) . La alianza estaba dominada por la URSS, que mantenía un estricto control sobre los otros estados firmantes del pacto.

A su vez el pacto reforzaba una serie de tratados bilaterales de ayuda mutua, que comprometían a las partes a facilitarse asistencia militar. Incluía asimismo, una serie de acuerdos entre la Unión Soviética y sus aliados sobre el estatuto de fuerzas, ligando a los firmantes en caso de que el pacto fuera disuelto.

El acuerdo, que se proclamó estrictamente defensivo con la finalidad de garantizar la paz de Europa, invocaba la carta de las Naciones Unidas para ejercer el derecho a la autodefensa y establecía en su artículo cuarto que, en caso de un ataque armado contra uno o varios de los estados signatarios, todos ellos debían prestarse ayuda inmediata individualmente y de acuerdo con los demás, incluso con el uso de la fuerza.

Este tratado dio lugar a la articulación de varios organismos reunidos en una estructura militar y otra política, donde el Comité Consultivo Político se encargaba de la Política Exterior, coordinación de planes económicos y puesta en práctica del tratado. Existía también una secretaría Conjunta y una Comisión Permanente en Moscú.

En caso de Guerra, las fuerzas de los miembros del Pacto estarían subordinadas operativamente al Mando Supremo Soviético. Este Pacto operó hasta más o menos 1989 cuando poco a poco se fue desarticulando por la caída del bloque socialista en Europa Oriental.