Planetas y sus características
Objetivo didáctico
Brindar a los estudiantes un conocimiento detallado sobre los planetas del sistema solar, sus características distintivas, y la importancia de su estudio en la comprensión del universo.
Introducción
El sistema solar es un conjunto fascinante de cuerpos celestes, dominado por el Sol y acompañado por una serie de planetas, cada uno con sus propias características y misterios. Desde los ardientes y rocosos planetas interiores hasta los gigantes gaseosos del exterior, cada planeta ofrece una perspectiva única sobre la formación y evolución del sistema solar.
Desarrollo del tema
Mercurio
Mercurio, mensajero de los dioses, representado con un casco alado.
– Diámetro ecuatorial: 4.878 Km.
– Elementos constituyentes: hierro, oxígeno, silicio, magnesio, aluminio, calcio, níquel
– Temperatura superficial: 327 a -183 grados Celsius
– Gravedad superficial: 0,38
– Velocidad de escape: 4,3 km./s
– Distancia media al Sol: 0,387 unidades astronómicas
– Período de rotación: 58,65 días terrestres
– Satélites: ninguno
Por su proximidad al sol, Mercurio es visible bajo la luz tenue del amanecer y del crepúsculo. Los astrónomos griegos lo denominaron Apolo cuando aparecía como estrella de la mañana y Hermes en sus apariciones vespertinas.
Mercurio, dios de las sandalias aladas y mensajero del Olimpo (Hermes) ha perpetuado su nombre en el planeta como referencia a la rapidez de su movimiento sobre el firmamento.
Mercurio es el primer planeta del Sistema Solar, por su proximidad a la estrella y el de menor tamaño.
Conocido por los antiguos astrónomos sumerios y griegos, Mercurio representó para la física uno de los más grandes enigmas. La determinación de su órbita desafió trabajos tan eminentes como los de Johannes Kepler e Isaac Newton que no lograron explicarla completamente.
Correspondió a Albert Einstein en 1915 explicar con su teoría de la relatividad general el movimiento completo de Mercurio lo que constituyó uno de sus más tempranos y espectaculares éxitos.
Venus
Venus, para los romanos y Afrodita para los griegos, diosa del amor y la belleza símbolo de la femineidad y sensualidad.
– Diámetro ecuatorial: 12.104 km.
– Elementos constituyentes: hierro, oxígeno, níquel, magnesio, silicio, aluminio, calcio, uranio, potasio, titanio, manganeso, torio.
– Temperatura superficial: 482 grados Celsius
– Gravedad superficial: 0,90
– Velocidad de escape: 10,3 km./s
– Distancia media al Sol: 0,723 unidades astronómicas
– Período de rotación: -243,01 días terrestres (movimiento retrógrado)
– Satélites: ninguno
La primera observación telescópica de Venus, realizada por Galileo Galilei en el siglo XVII, descubrió en el planeta fases de luminosidad similares a las de la Luna. La evidencia de este hallazgo se contraponía a la teoría geocéntrica del universo, muy en boga por esos días y daba su apoyo a la teoría heliocéntrica de Nicolás Copérnico, que situaba el Sol en el centro del sistema. Por eso, el descubrimiento fue publicado en forma encubierta limitándose a decir que Venus giraba en torno al Sol.
Venus es el segundo planeta del Sistema Solar en relación de distancias del Sol. Por su posición, Venus se ve al atardecer y al amanecer.
El nombre de Venus divinidad romana del amor, no puede ser más contradictorio con las características del planeta, porque aunque Venus es del mismo tamaño que la Tierra, las condiciones de su entorno son muy parecidas a las que imaginamos en un infierno.
Venus está cubierto por nubes de vapor de agua y ácido sulfúrico tan densas que no podemos ver su superficie sin sofisticados sistemas de radar. Las temperaturas en la superficie del planeta sobrepasan los 460 grados Celsius y la lectura de un barómetro alcanzaría una cifra cien veces más alta que en la Tierra.
Dado que la atmósfera es casi completamente de dióxido de carbono podemos concluir que Venus padece de un fuerte efecto invernadero. La radiación del sol calienta la superficie igual que la de la Tierra, pero el calor no puede disiparse a través del espeso capullo de dióxido de carbono y nubes. Incluso por la noche la temperatura apenas disminuye.
Tierra
Desde la perspectiva que tenemos en la Tierra, nuestro planeta parece ser grande y fuerte con un océano de aire interminable. Desde el espacio, los astronautas frecuentemente tienen la impresión de que la Tierra es pequeña, con una delgada y frágil capa de atmósfera.
– Diámetro ecuatorial: 12.756 km.
– Temperatura superficial: 150 grados Celsius
– Gravedad superficial: 9,78
– Velocidad de escape: 11,18 km./s
– Distancia media al Sol: 149,600,000
– Período de rotación: 365.256
– Satélites: Uno
La Tierra es el tercer planeta más cercano al Sol, a una distancia de alrededor de 150 millones de kilómetros (93.2 millones de millas). A la Tierra le toma 365.256 días viajar alrededor del Sol y 23.9345 horas para que la Tierra rote una revolución completa. Tiene un diámetro de 12,756 kilómetros (7,973 millas), solamente unos cuantos kilómetros más grande que el diámetro de Venus. Nuestra atmósfera está compuesta de un 78 por ciento de nitrógeno, 21 por ciento de oxígeno y 1 por ciento de otros constituyentes.
La Tierra es el único planeta en el sistema solar que se sabe que mantiene vida. El rápido movimiento giratorio y el núcleo de hierro y níquel de nuestro planeta generan un campo magnético extenso, que, junto con la atmósfera, nos protege de casi todas las radiaciones nocivas provenientes del Sol y de otras estrellas. La atmósfera de la Tierra nos protege de meteoritos, la mayoría de los cuales se desintegran antes de que puedan llegar a la superficie.
De nuestros viajes al espacio, hemos aprendido mucho acerca de nuestro planeta hogar. El primer satélite americano, el Explorer 1, descubrió una zona de intensa radiación, ahora llamada los cinturones de radiación Van Allen. Esta capa está formada por partículas cargadas en rápido movimiento que son atrapadas por el campo magnético de la Tierra en una región con forma de dona rodeando el ecuador. Otros descubrimientos de los satélites muestran que el campo magnético de nuestro planeta está distorsionado en forma de una gota debido al viento solar. . También sabemos ahora que nuestra fina atmósfera superior, que antes se creía era calmada y sin incidentes, hierve con actividad creciendo de día y contrayéndose en las noches. Afectada por los cambios en la actividad solar, la atmósfera superior contribuye al tiempo y clima en la Tierra.
Además de afectar el clima en la Tierra, la actividad solar genera un fenómeno visual dramático en nuestra atmósfera. Cuando las partículas cargadas del viento solar se quedan atrapadas en el campo magnético de la Tierra, chocan con moléculas de aire sobre los polos magnéticos de nuestro planeta. Estas moléculas de aire entonces empiezan a emitir luz y son conocidas como las auroras o las luces del norte y del sur .
Marte
Marte, dios romano de la guerra, símbolo de la fuerza y la energía. Su figura está asociada con la valentía y la masculinidad .
– Diámetro ecuatorial: 6.794 km.
– Elementos constituyentes: hierro, silicio, magnesio, azufre, aluminio, oxígeno, potasio, hidrógeno, níquel
– Temperatura superficial: -23 grados Celsius
– Gravedad superficial: 0,38
– Velocidad de escape: 5,02 km./s
– Distancia media al Sol: 1,52 unidades astronómicas
– Período de rotación: 24, 62 horas
– Satélites: dos
El planeta Marte se ha asociado desde la antigüedad con las fuerzas destructivas del hombre y la naturaleza. El pueblo babilónico lo identificó con su deidad de la muerte Nergal y para la cultura grecolatina fue el dios Ares o Marte el que gobernaba y decidía la suerte de las batallas.
Marte es el cuarto planeta del sistema solar por su distancia al Sol y el séptimo en orden de tamaño.
Visto desde la Tierra, Marte asombra a los astrónomos porque en determinadas épocas su órbita observa un movimiento retrógrado, o inverso a la evolución usual del sistema solar.
Kepler explicó en 1609 estas anomalías al enunciar sus tres famosas leyes del movimiento planetario. Con ellas demostró que el supuesto transcurrir inverso de la trayectoria de Marte es en realidad un efecto óptico motivado por el movimiento conjunto y relativo del planeta y de la Tierra.
En su interior, Marte se considera dividido en tres zonas bien diferenciadas: el núcleo, probablemente sólido, de alta densidad y unos 1700 kilómetros de radio; el manto de menos acumulación de materia y una estrecha corteza.
Júpiter
Júpiter, dios de dioses y Zeus para los griegos, fue el soberano del Olimpo y el más poderoso de todos.
– Diámetro ecuatorial: 142.800 Km.
– Elementos constituyentes: hidrógeno, helio, oxígeno, hierro, magnesio, silicio, nitrógeno, neón, argón, oxígeno, carbono, sodio, fósforo, azufre.
– Temperatura superficial: -150 grados Celsius
– Gravedad superficial: 2,69
– Velocidad de escape: 59, 5 Km./s
– Distancia media al Sol: 5,20 unidades astronómicas
– Período de rotación: 9,8 horas
– Satélites: 16
Su masa 300 veces mayor a la de la Tierra y unas 2,5 veces la masa de todos los planetas juntos, Júpiter domina el Sistema Solar. Fue el primer planeta que estudió Galileo a través de su telescopio.
Los sistemas de estrellas múltiples, ligadas entre sí por fuerzas de tracción gravitatoria, son muy abundantes en el universo. Por eso ciertas teorías señalan que el sistema solar no es sino un esbozo de conjunto estelar binario en el que el planeta Júpiter no llegó a alcanzar el estado de estrella por no poseer suficiente acumulación de masa.
Júpiter constituye el quinto planeta del sistema solar por su proximidad al sol y el primero en orden de tamaños.Su nombre evoca al principal de los dioses de la mitología grecolatina.
Junto a Saturno, Urano y Neptuno, Júpiter es un gigante gaseoso mucho más macizo y mucho menos denso que el más pequeño y rocoso planeta del sistema solar interno. Su atmósfera es una amalgama de hidrógeno, helio, metano y amoniaco. Bajo la parte superior de las nubes hay ciertos estratos de gases densos con un núcleo pequeño y rocoso situado en el medio.
Júpiter gira vertiginosamente una vez en menos de 10 horas. Esto aplana el disco del planeta en los polos y fuerza las dinámicas formas metereológicas de las nubes que envuelven el planeta, lo que provoca rápidos cambios en sus elementos. Su nebuloso disco tiene unas bandas con unas zonas brillantes pero variables.
Saturno
Saturno, dios romano de la cosecha y la agricultura, para los griegos era Crono, padre de Zeus .
– Diámetro ecuataorial: 120. 660 Km.
– Elementos constituyentes: hidrógeno, helio, oxígeno, carbono, azufre, nitrógeno
– Temperatura superficial: 160 grados Celsius
– Gravedad superficial: 1,19
– Velocidad de escape: 35,6/s
– Distancia media al Sol: 9.539 unidades astronómicas
– Período de rotación: 10,2 días terrestres
– Satélites: veintidós
Por su distancia del Sol, este es el sexto planeta del Sistema Solar y segundo por su dimensión y masa. Aunque su destacado brillo lo hizo conocido desde la antigüedad fue Galileo quien tuvo el privilegio de observarlo por primera vez a través del telescopio y detectar algunas de sus satélites. También anotó otra peculiaridad que, cincuenta años después, confirmó el holandés Cristián Huygers: la existencia de los anillos que circundan el planeta.
En el siglo XVIII sus lunas ya eran identificadas. Pero la mayoría de sus otros satélites no fueron descubiertos sino hasta el siglo pasado, cuando se desarrollaron potentes instrumentos ópticos.
Saturno tiene una masa 95 veces más grande que la de la Tierra y su volumen es 750 veces mayor que el de nuestro planeta.
Urano
Urano, dios romano del cielo, padre de Saturno.
– Diámetro ecuatorial: 51.800 Km.
Elementos constituyentes: oxígeno, nitrógeno, carbono silicio, hierro, agua, metano, amoniaco, hidrógeno, helio.
– Temperatura superficial: 190 grados Celsius
– Gravedad superficial: 0,93
– Velocidad de escape: 21,22 km./s
– Distancia media al Sol: 19,18 unidades astronómicas
– Período de rotación: 15,5 horas
– Satélites: 15
Con un telescopio de su invención, el británico William Herschel detectó en 1781 el planeta que luego fue bautizado como Urano. Su nombre alude al padre de Saturno o Cronos en la mitología grecolatina. Por su similitud con las características de Neptuno, Urano está considerado como gemelo de este aunque en su posición respecto al Sol está más cerca y ocupa el séptimo lugar planetario. Cuando la visibilidad es buena, este planeta puede avistarse sin instrumentos pues aparece como una débil estrella en el firmamento.
El aspecto de este planeta en el cielo es el de una luminaria de débil magnitud ligeramente azulada. Este color supone la existencia de gas metano, debido a que este elemento absorbe fuertemente la radiación roja que debería emerger del planeta. Dos de los satélites de Urano fueron descubiertos también por Herschel a fines del siglo XVIII.
Neptuno
Neptuno, dios romano del mar, hijo de Saturno y hermano de Júpiter y de Plutón. Para los griegos se llamaba Poseidón.
– Diámetro ecuatorial: 49.500 Km.
– Elementos constituyentes: oxígeno, nitrógeno, silicio, hierro, hidrógeno, carbono.
– Temperatura superficial: 220 grados Celsius
– Gravedad superficial: 1,22
– Velocidad de escape: 23,6 km./s
– Distancia media al sol: 30,06 unidades astronómicas
– Período de rotación: 16 horas
– Satélites: ocho
Antes de ser visto en el cielo Neptuno fue intuido. El comportamiento de otros cuerpos celestes le indicaban a los astrónomos que existía una masa de atracción que, sin embargo, no habían visto nunca. Fueron los cálculos matemáticos, a partir de la doctrina astronómica mecanicista de Kepler y Newton, los que condujeron a la confirmación de la existencia de este planeta. El astrónomo alemán Johna Gottfried Galle y el francés Urbain Jean Joseph Leverrier llevaron a cabo los trabajos.
Al descubrir Urano, el inglés Herschel formuló todos los cálculos orbitales que guiaban su comportamiento. Sin embargo, al hacerse la observación astronómica, dichos cálculos no funcionaban. Leverrier, primero, y Galle después se dedicaron a demostrar que Urano no cumplía las rutas y los tiempos trazados porque la atracción de otro planeta se lo impedía. Así, en un trabajo perseverante se descubrió Neptuno. Este planeta, octavo en distancia al Sol está rodeado de una espesa atmósfera que dificulta la observación de su superficie, y por eso su composición sólo puede suponerse.
Neptuno fue bautizado con el nombre del dios griego del océano. Sus satélites -Tritón y Nereida- son los más conocidos. Tritón tiene un movimiento retrógrado con respecto al planeta y es mucho más denso que éste. Debido a su paulatino acercamiento, se estima que en el futuro colisionará con Neptuno y su material se convertirá en un anillo alrededor de él.
Plutón (planeta enano)
Plutón, también llamado Hades, era el rey del mundo subterráneo con la reina Perséfona.
– Diámetro ecuatorial: 2,285 Km.
– Elementos constituyentes: carbono, hidrógeno
– Temperatura superficial: -238 grados Celsius
– Gravedad superficial: 0,20
– Velocidad de escape: 7,7 km./s
– Distancia media al Sol: 39,44 unidades astronómicas
– Período de rotación: 6,3 días terrestres
– Satélites conocidos: uno
Plutón es en la mitología grecolatina, el dios de las profundidades y los infiernos. En astronomía, ha dejado de ser un planeta del Sistema Solar para convertirse en un planeta enano. Su descubrimiento se efectuó en este siglo, aunque tenían presunciones de su existencia desde antes. El astrónomo Percival Lowell y su equipo en el observatorio de Arizona, trabajaron sobre la hipótesis de su existencia, la que fue comprobada en 1930, cuando Lowell ya había fallecido.
Plutón demora 248 años terrestres en recorrer toda su órbita y en algunos períodos se acerca tanto a la órbita de Neptuno que deja a este último planeta en la parte más externa del sistema. Por esta relación de atracción y por otras observaciones de los especialistas, aún muchos estiman que Plutón fue alguna vez satélite de Neptuno.
Conclusión
Los planetas del sistema solar son mundos fascinantes que ofrecen una amplia variedad de ambientes y características. Su estudio no solo nos ayuda a comprender mejor el lugar donde vivimos, sino que también nos da pistas sobre la formación y evolución de otros sistemas planetarios en el universo.
La exploración de los planetas nos brinda una ventana al pasado, presente y futuro del sistema solar. A medida que continuamos estudiando estos mundos, nos acercamos a responder algunas de las preguntas más fundamentales sobre nuestro lugar en el cosmos.
Actividad de aprendizaje autónoma
- Elija uno de los planetas y realice una investigación más profunda, explorando aspectos como su historia de descubrimiento, misiones espaciales que lo han visitado y su importancia en la cultura popular.
- Cree un modelo a escala del sistema solar utilizando materiales reciclados.
- Redacte un ensayo sobre la posibilidad de vida en otros planetas del sistema solar basándose en las características que ha aprendido.