Enfermedades de transmisión sexual
En primer lugar, destacan las enfermedades de transmisión sexual (ETS) como pueden ser: la gonorrea, la sífilis. El herpes, el virus del papiloma humano y, el VIH―sida.
Gonorrea
Es una infección provocada por la bacteria Neisseria gonorrheae, que se adquiere al mantener relaciones sexuales con una persona portadora de esa bacteria. Entre sus síntomas destacan las secreciones vaginales y el sangrado, o la pus en el pene. También se manifiesta con dolor al orinar, así como dolor en la parte baja del abdomen. La gonorrea puede provocar esterilidad. Las mujeres con esta enfermedad pueden contagiar al bebé, quien puede quedar ciego al momento de nacer.
Sífilis
Es una enfermedad de transmisión sexual ocasionada por la bacteria Treponema pallidum. Se transmite cuando se entra en contacto con las heridas abiertas de una persona con sífilis. El primer síntoma es una llaga (chancro) en la parte del cuerpo que entró en contacto con la bacteria. Estos síntomas son difíciles de detectar porque por lo general no causan dolor y, en ocasiones, ocurren en el interior del cuerpo.
La aparición de llagas en pies y manos, la inflamación de ganglios, la fiebre y la caída de cabello son manifestaciones posteriores de la sífilis. En su fase más aguda, puede causar trastornos mentales, ceguera, anomalías cardiacas y trastornos neurológicos y, como desenlace, la muerte.
Herpes
El herpes es una enfermedad de transmisión sexual causada por dos tipos de virus el simple I y el simple II y se distingue por las llagas muy dolorosas que provoca ya sea en los genitales o en la boca, llagas que dejan costra cuando se secan. El herpes no es una infección mortal, pero si el sistema inmunológico del paciente se halla muy debilitado, esta enfermedad puede tornarse muy complicada y hostil.
Papiloma humano
Es una enfermedad viral causante de verrugas genitales muy contagiosas que pueden desarrollarse como un tejido carnoso con aspecto de coliflor. El papiloma humano puede derivar en un cáncer cérvico-uterino, por lo cual es causa de muerte para muchas mujeres. Aunque se puede controlar si se detecta oportunamente, el papiloma humano no se cura; en consecuencia, quien lo adquiere se vuelve portador permanente y puede contagiar a otras personas.
VIH―Sida
Es una de las enfermedades de transmisión sexual más severas a partir de la década de 1980 y hasta la fecha, verdadera pandemia que ha causado elevados índices de mortandad en todo el mundo. El virus de inmunodeficiencia humano debe su nombre a «su modus operandi», pues ataca a los linfocitos T-I\L por lo que afecta el sistema inmunológico de la persona. Al debilitarse las defensas del organismo, se desarrolla el síndrome de inmunodeficiencia adquirida, el sida. El individuo queda entonces expuesto a múltiples «enfermedades oportunistas», muy peligrosas connforme el sistema inmunológico pierde eficacia de manera crónica.
Además del contagio por transmisión sexual, el sida frecuentemente se adquiere por el uso de jeringas o instrumental punzocortante contaminado, por transfusiones sanguíneas sin precauciones v por la madre portadora del virus hacia su hijo durante el embarazo o la lactancia.
El contagio de enfermedades de transmisión sexual (ETS) se relaciona con la desinformación y la irresponsabilidad. Generalmente estas enfermedades se pueden prevenir por medio de la abstinencia, es decir, evitando el contacto sexual.
El uso correcto del condón en cada relación sexual es otro medio útil para disminuir el riesgo de contraer una enfermedad de este tipo. Pero también es importante acudir al médico cuando se ha detectado algún síntoma, o de manera preventiva realizar estudios de laboratorio que puedan detectar o descartar oportunamente cualquier Infección.
Los tratamientos para contrarrestar las ETS más comunes son el uso de antibióticos y desparasitantes. A veces se pueden cauterizar o extirpar algunas lesiones en los órganos sexuales.
En el caso del VIH―Sida, el tratamiento se realiza aplicando retrovirales, medicamentos muy caros que buscan desactivar la capacidad del virus para replicarse o reproducirse. Actualmente se experimenta con el desarrollo de una vacuna eficaz para prevenir el VIH, pero el sida continúa siendo actualmente una enfermedad incurable.